Hace 1.977 años, que el
imperio romano-hebreo judeosaico y sus cómplices, masacraron la vida del hombre
de Belén y carpintero del amor. La campana llama al culto diariamente en varios
puntos del globo terráqueo pero nadie escucha. Quienes se llaman a sí mismos
cristianos no van a las ceremonias impuestas, porque se han dado cuenta que es
estafa la promoción de la fe y la creencia manipuladora. Otros se han alejado
de las capillas con sus ladrillos y tablas, porque sus ‘líderes’ son enfermos
fanáticos, prohíben a sus seguidores una suma de normas y requisitos, que ni
siquiera ellos pueden con las mismas dentro de sus apetitos habituales. La
sociedad no ha podido construir con acciones de amor y servicio, la “ciudad del
amor”, que de cierta manera fue diseñada, vivida y trabajada, con divinas y
humanas enseñanzas, por el Hijo de Dios.
Desde entonces unos varones vivarachos tanto de Oriente y Occidente, han
monopolizado con oscuras intenciones y bajos intereses en sus instintos,
dogmáticas doctrinas y podridas acciones, del verdadero Evangelio de Cristo.
Esos han hecho de las suyas derramando cada día congojas de inocentes,
sembrando odio, injusticias y desigualdades, sobre cabezas, cuerpos y
espíritus, de todos los mortales terrícolas humanos que padecen la masacre a
sus rectos ideales de paz y justicia. Todavía existe la secuela humana imperial
en la cúpula, que participó con mentiras, farsas y engaños del vil asesinato de
Jesús el Nazareno. Desde sus tribunas engañan al pueblo del Altísimo, con
rezos, novenas, oraciones y predicaciones, que ni siquiera alegran el caparazón
de sus propios corazones y alcantarillas. Simplemente han usado la palabra como
expresión, para atemorizar a toda la humanidad para que no avance en conciencia
hacia lo alto de donde viene el auxilio y socorro. Mientras quienes se han
hecho llamar “escogidos,” viven como emperadores y reyes, consumiendo los
alimentos que deben ser distribuidos en propiedad para el disfrute de todos y
de todas las personas sin distinción.
El 99% de los pobladores terrícolas pasan hambre, se desgarran en miserias y
atropellos, mientras uno pocos engordan como marranos y vacas de ceba para cada
navidad. Se observa que sus robustos cuerpos y grasas, están muy cerca de las
calderas que usa Satán dentro del infierno para freír sus fechorías sobre
vientres de incautos seguidores. El 1% de los humanos se apoderaron de los
privilegios. La sociedad adolorida y aporreada, debe reclamar con vómitos y protestas
contundentes pacificas, cada fechoría, para derrocar a quienes no deben estar
dentro de la farsa. El porcentaje de la población mundial que robó lo de todos
y todas, debe devolver cada recurso, distribuyendo la riqueza, recursos y
oportunidades, a la raza humana, y equilibrando la existencia armónica de
animales, plantas y de elementales.
Escuchan y ven por los medios comerciales de comunicación, a presidentes de
turno de naciones poderosas, defender la vida y firmando documentos en contra
del aborto. Cualquier cristiano y/o creyente, sabe que eso que lanza el
gobernante a favor de la vida de un hijo o hija de Dios, es agradable a los
ojos del Creador. El aborto en cualquiera de sus etapas de gestación o
dimensión, es asesinato y rompe toda comunicación con el autor de la vida.
Quien defiende la vida ayuda a la permanencia de las especies incluyendo, la de
plantas y animales. Algunos dicen que un simple cogollo no es el fruto pero ¿Qué
pasaría si no hubiera existido ese pequeñísimo capullo?, uno entre todos no
estaría en este plano terrenal y nadie hubiera materializado esta carta. No han
pasado 15 días, cuando el mismo ‘personaje’ que estuvo en contra del aborto,
escribe desde su escritorio un nuevo decreto gubernamental, para que sus
soldados invadan una jurisdicción territorial de otra nación que da muestras de
poseer recursos naturales y riquezas.
Los militares y soldados del supuesto defensor de la vida, ingresan y asesinan
la existencia de varones y mujeres que también tienen el mismo derecho a vivir
para dar continuidad a la sobre vivencia de la especie humana. Esta forma de
asesinar y masacrar, fue aprendida por algunos, de historias narradas en falsos
libros que acuñaron dentro del “Antiguo Testamento” del libro “Biblia”, que se
conoce como Palabra de Dios. Muchas de las acciones asesinas escritas allí, no
es otra cosa que enseñanza de dioses demonios y humanos torcidos. NO MATAR, es
la verdad. Las comunidades afro descendientes (negras), e indígenas criollos,
son desaparecidos por algunos gobiernos en varios países del globo. Hoy sus
almas claman al cielo de Dios justicia. Sus espíritus han bajado a la tierra
para decir: Basta de falsos positivos.
Las bombas, balas y tóxicos, que lanzan aviones, helicópteros y tanques de
guerra, caen sobre la humanidad de mujeres embarazadas y las hacen abortar. Otras
damas se desangran a la vera del camino con sus hijos e hijas. Mueren niños,
ancianos, animales y plantas. El firmamento de los poblados se convierte en
bases y trincheras para destruir la vida y el equilibrio del planeta. El
espacio del aire se vuelve especie de juego pirotécnico. El gobernante que
supuestamente estaba en contra del aborto demuestra que solamente es un
hipócrita, que se burla hasta de la mujer que lo parió como madre biológica.
Asesinar la vida usando formas u objetos de cualquier índole, es pecado mortal
y la acción no es amada por el Todopoderoso. Los jueces que firman ‘penas de
muerte’ sobre aquel hijo o hija de Dios, y que la sociedad considera
delincuente, a quien colocan en la silla mal oliente, también son asesinos y
participan del hecho tanto como aquel que mueve la palanca y/o la aguja, para
ejecutar con muerte al sentenciado. ¿Quién ha dado autoridad a un juez para
asesinar a un humano por más delincuente que sea? ¿De quien recibió el poder de
matar o asesinar?
Los defensores del matrimonio y familia, han perdido credibilidad y tacto para
criticar a quienes violan principios de fidelidad en la unión. Los mismos han
falseado el sagrado vínculo uniéndose a varias mujeres o varones, de la misma
manera como se cambia la pintura de las casas y edificios. Ellos simplemente
dicen ‘me divorcié de mi primera esposa y ahora convivo con otra’. Nos causó
sorpresa desagradable conocer la doble moral de un grupo religioso
tradicionalista que a capa y espada daba cátedra a favor de la familia. Al
investigar el pasado de esos “personajes” nos dimos cuenta que habían
abandonado a la primera mujer y se habían unido a otras, una y hasta cinco
veces. Con esos ejemplos lo mejor sería que guardaran silencio y que se
retiraran de la falsa organización. “Quien tiene rabo de paja no se debe
arrimar a la candela.” Con sus voces y gargantas persiguen a quienes violan las
supuestas leyes pero ellos andan peor que los verdugos.
La propaganda publicitaria dice que existen varones religiosos que permanecen
solteros (célibes), porque sus vidas y cada una de sus energías, se las han
entregado a Dios y/a la Iglesia inventada que representan. Pero la verdad es
otra no muy santa y nada recta. Las amantes de los supuestos castos, residen
muy cerca al pueblo de la parroquia y crían a sus hijos como sobrinos o
simplemente ellos mismos los bautizan y los convierten en ahijados. Detrás de
cada puerta hay un secreto amoroso y la castidad está más lesionada que la
bandera de la mafia. Lo mejor es permitir que los varones y mujeres amen en
forma libre. Y si son religiosos de profesión, para que la ‘palabra’ se parezca
en algo a los hechos, es mejor que se casen, así tengan la otra preferencia.
Tener hijos a escondidas o un amor detrás del closet, es traumatizante. Nadie
debe tener miedo de presentar a la persona que ama. El mundo debe saber que los
órganos funcionan igual en todos los mortales terrícolas humanos. Las amantes
“deben salir de los armarios” y los mozos deben firmar acta de matrimonio de
inmediato.
La sexualidad es un derecho que debe existir y el que se debe aceptar
interpretando que la preferencia sexual entre adultos debe ser respetada. Aunque
ciertas formas causan molestia, tampoco se debe exagerar la costumbre. Las
personas adultas tienen como deber desarrollar su sexualidad con adultos.
Ningún decreto o código humano lo debe impedir. La pareja de mujeres que
defendieron en Estados Unidos, la unión de parejas del mismo sexo y de hecho se
unieron en la oficina del notario, el baile no duró sino 16 meses. La noticia
del gran amor de las dos damas protagonistas, recorrió los medios
sensacionalistas de comunicación en USA. Ellas no aguantaron cumplir con
aquello que habían predicado a capa y espada. El segundo noviembre lanzaron la
segunda primicia: “Las dos nos vamos a separar porque hemos comprobado que no
nos amamos y que estábamos equivocadas.” Como si fuera una gelatina escasa de
materia prima, lesionaron la palabra inicial. Luego crearon una nueva defensa
para afirmar que así es la vida. Vergonzosa la escena para quienes desfilaron
con ellas en las calles y avenidas de varias ciudades estadounidenses. El
carnaval del orgullo se quedó burlado. Los amigos de la pareja se olvidaron del
asunto pero se les notó la tristeza y frustración, el día que los noticieros
regaban la segunda noticia como polvo de desierto. Ese es un solo ejemplo de lo
fácil que contradecimos los hechos contra las predicaciones y palabras que
usamos. “El cura predica pero no aplica.” El obispo clama pero no ama.
Los artistas, poetas y escritores, componen canciones y estrofas, cuyo tema
principal es el amor y dedican su canto al romance del momento. Nos parece
maravilloso escuchar una letra de amor en donde los protagonistas o las
protagonistas, lanzan al viento del espacio planetario su amor y hacen vibrar
el sentimiento de todos los humanos. Todos y todas alguna vez han llorado por
la letra de una canción y algunos tuvieron la oportunidad de compartirla con el
ser amado, danzando sobre una pista y en brazos de quien los hizo soñar con
éxtasis desconocido. No han pasado seis meses cuando los mismos cantantes de
hoy, están dedicando una nueva canción a otra u otro, sin mayor explicación.
Cínicamente expresan: “Hoy no nos amamos con la anterior y/o con el anterior, y
ahora amamos a otro nuevo ser”. ¿Dónde estará la razón de la ambivalencia? ¿Por
qué cambiamos de la noche a la mañana la propuesta inicial? ¿Cuántos vestidos
de novia debemos confeccionar para cada pareja? ¿Y del novio qué?
Hoy declaran amor eterno al ser amado y al otro día hay otro que reemplaza al
de ayer. Hasta los científicos han inventado y han afirmado que hay una
glándula que regula el amor y que si la misma no trabaja, el amor muere. No
será más bien para darle rienda suelta al apetito indisciplinado que conduce al
abismo lujurioso del placer fácil. Hay revistas que se han especializado en
mostrar el nuevo vestido “blanco”, de la misma novia que cambia de marido cada
año. Lo único que no pueden mostrar al mundo de la vanidad, son las arrugas que
hacen encoger la piel y sobre todo aquella que rodea las manos. Algunas y
algunos llegan a las 60 primaveras y aún se creen de 15 años. Se comportan tal
o cual como lo hace un adolescente. En el pasado se creía que los humanos al
llegar a los 50 años, eran personas equilibradas sexualmente. Las muestras
están al orden del día y quienes mejor violan las normas, son los adultos y una
gran mayoría usan su bastón pero no de mando sino de ayuda. Esta es una de las
razones por las cuales los jóvenes no creen en los adultos. Las mejores
picardías salen de los experimentados ancianos y ancianas.
Las entidades universitarias y aquellas que imparten educación, afirman que son
las mejores del país, departamento, provincia o ciudad. No han pasado los años
cuando el “profesional” se da cuenta que fue estafado por la institución y
deben costear de nuevo cursos y mas cursos. Ninguno de esos satisface la real
necesidad social. Los diplomas y los títulos solo sirven para colocarlos en la
pared de la habitación. Ellos o ellas, pasan a conducir un taxi o terminan como
jardineros de quienes se creen de “mejor familia.” En una sola hectárea hay más
de 10 centros universitarios y cada uno de esos sólo son montajes, trampas para
explotar y sacar el dinero de los bolsillos de quienes realmente trabajan y
producen. La lista de entidades de formación ya no cabe en los directorios
telefónicos y han hecho directorios especializados para meter toda la gama de
propuestas. Un campesino dijo: “ninguna sirve ni para un remedio.”
Los profesionales del derecho y la jurisprudencia son los especialistas en
crear mentiras y las convierten en verdad para defender a los delincuentes y
facinerosos. Hasta las cámaras de seguridad y las mismas de televisión, han
tenido que soportar la estafa de los abogados. Los jerarcas de la ONG
espiritualistas, le están entregando el cielo a los asesinos. Las indulgencias
del pasado ahora se costean y se aplican aunque no con el mismo método si con
el mismo dinero. Los mismos que dicen defender la democracia son los mismos que
en un golpe de estado, de acuerdo a las conveniencias, ríen a carcajadas y se
mofan de sus anteriores palabras, cuando de golpe de estado se trata. La
televisión alternativa latinoamericana mostró el rostro demoníaco de un
religioso, con un ordinario celular en sus orejas, al lado de otros de los
farsantes. Nos produjo dolor de estómago y vómito, ver como se usa el cambio camaleón de acuerdo a cada uno de los intereses.
La palabrería debe desaparecer y en vez de cháchara barata, la debemos
convertir en: Vivienda, alimentación, trabajo, producción, recreación,
educación, salud, libertad de expresión y pensamiento, justicia, paz,
solidaridad, fraternidad, hermandad, recato, disciplina, decoro, y
laboriosidad. Cada necesidad que se presente dentro del pueblo de Dios, se debe
enfrentar con amor y servicio. El circo es positivo para la recreación pero no
para enfrentar la verdad que debemos defender en sencillez, humildad y
templanza. Menos de lo mismo y sólo hechos de paz. Jesucristo ya no puede
decirnos al oído porque el ahora actúa como espíritu. Los hombres deben
recordar la frase y seguir investigando la sentencia que el pronunció. ¿Será
que no son consientes de las maldades y disparates que se hacen?
¿Hasta cuando Dios debe seguir hablando? «Padre, perdónalos porque no saben lo
que hacen» -“Pater, dimitte illis; non enim sciunt quid faciunt”-,
*"Father, forgive them, they know not what they do."*. Lukas. 23: 34;
El maestro de la luz dejó antes de partir algunos interrogantes. Lo mataron
antes de tiempo y no pudo explicar a sus seguidores apóstoles la forma exacta
para renovar la sociedad y convertirla en un ente de paz y amor. Cuando se leen
las sagradas escrituras se comprende que el Hijo del Altísimo, dejó sin
concluir su misión. Si bien es cierto que un hombre de 33 años ya tiene un
bagaje histórico acumulado, es más cierto que se requiere de más tiempo y
espacio, para poder enseñar el tratado del amor y transmitir la ciencia de la
justicia. El carpintero sabía que no podía violar la ley natural creada por el
Padre Dios y que si aceleraba el proceso se iría en contra de una realidad que
es superior a la misma sabiduría. Los discípulos del Nazareno eran analfabetos
y no entendieron todas las razones y explicaciones que éste daba. Según la
Biblia, Jesús solo trabajó como maestro 3 años. Es un tiempo muy corto para que
una sociedad terca, acostumbrada a injusticias y desamores, hubiera hecho un
cambio de vida y parecer.
La llegada del Espíritu Santo sobre el Colegio de los 12, los tomó por
sorpresa. Ellos no sabían en sí que era lo que esperaban. Los apóstoles
solamente eran mortales terrícolas humanos. Jesucristo les habló de otro mundo
pero ellos no entendieron. Muchos de ellos como Pedro querían que el Cristo de
Paz, destruyera con acciones bélicas a los enemigos. De hecho el día que los
militares del imperio secuestraron a Jesús, dice la Palabra, que éste (Pedro),
“saco una espada y le corto la oreja” al soldado que lo aprehendió (A Jesús).
El gobernante de turno tuvo miedo y creía que los ángeles del Señor, atacarían
a Roma si se tocaba la humanidad del Mesías. El Cristo no dejó a nadie en la
tierra para su reemplazo porque Dios no lo autorizó dentro de la misión. A
veces no se entiende el porqué tenía que morir. Es una verdad que nos cuesta
hasta la fe. Los hombres están acostumbrados a defender cada uno de sus
pensamientos sin embargo Jesús sin huir no defendió su propia vida y razón. ‘Fue
manso como un corderito al matadero’. El no contrató mercenarios, guerrilleros,
militares y/o paramilitares. No tuvo un grupo armado legal o ilegal. Jamás un
policía o un soldado y menos un guarda espalda. El Hijo de Dios se identificó
trabajando obras sanas, rectas, y enseñando el camino verdadero: La paz sin
armas y en silencio.
Quienes caminaron con el Nazareno, estuvieron confundidos cuando Jesús les
hablaba como Hijo y cuando lo hizo como Dios. Hubo en Jesús dos formas
diferentes de concebir la vida y la comunicación. La una era para ejecutarlas
en la tierra y la otra en otro punto muy diferente del globo terráqueo. Los
doctores de la época como los de ahora, desconocían en si la naturaleza del
Dios que se hizo hombre. El mundo terrenal siempre ha vomitado oportunistas.
Detrás del líder más de uno come y vive mejor que el propietario del proyecto y
de las ideas. El dueño del ideal padece hambre mientras sus seguidores hasta
esposa e hijos tienen. Es en ese rompecabezas que se afirma que Jesucristo no
le entregó las llaves de una Iglesia terrenal a nadie. Le dijo a Pedro antes de
morir: “A ti te daré las llaves del cielo.” El cielo según el maestro no está
en la tierra. Es en otro plano en donde existe y varios lo encontrarán. El
cielo del que hablaba Jesús, está en otro planeta, galaxia y universo.
Jesús dijo que moriría y resucitaría al tercer día. Por eso cuando se dirige al
convertido desde la cruz lo hace como Dios. Allí mismo toma la autoridad de
Dios y la misma del Padre. Jesús no fundo ninguna Iglesia u organización
religiosa como tal y como se aprecia en la tierra, en donde existen para todos
los gustos. Dio si las bases para mejorar las condiciones de vida del planeta
tierra a través del amor y servicio. Un lugar de paz es de cierta manera un
paraíso. No existe un lugar en este mundo tierra, que se pueda comparar con un
paraíso como tal. Ni el Sur ni el Norte ofrece paz a los hombres. Ni Oriente y
menos Occidente. En los cuatro espacios los mortales humanos son conflictivos,
egoístas, envidiosos y mentirosos. Ni Oriente ni Occidente dan amor a la raza
humana. Ambos frentes han sembrado guerras, indisciplina, destrucción y muerte.
En algunos momentos de la historia, los hombres de cada punto cardinal se
comportan iguales o peores que los otros. Los hombres religiosos ‘espirituales’
no han captado la verdad de la enseñanza de Jesucristo. Lo que hay es sólo una
estafa. Ellos han engañado y han hecho de las enseñanzas del Maestro de la luz,
un negocio lícito e ilícito. Los libros y científicos, no han podido explicar
realmente como sería una tierra en paz.
¿Porque la ciencia no ha sido capaz de distribuir la comida y el trabajo en
forma justa? ¿Porque los gobiernos trabajan más la guerra que la paz? ¿Cuál
será el único sistema que logre dar equilibrio a la sociedad humana? El
inconforme gustaría escuchar de uno de los científicos, doctores de la ley,
profesionales, educadores, artistas o gobernantes de turno, que le dijeran al
oído en momentos de crisis e indisciplina:
«En verdad te digo: hoy mismo estarás conmigo en el Paraíso» -“Amen dico tibi:
hodie mecum eris in Paradiso”-, *This day thou shalt be with me in
Paradise."*. Lukas 23: 43.
El obrero de la madera sabía que el imperio lo masacraría. Hasta el último
minuto de vida el Cristo pensó más en los demás que en él mismo. Jamás se le
notó egoísta o envidioso. Diferenció con su sabiduría que unos humanos eran más
desprotegidos que otros. Al optar por los pobres, le costó la vida. La escena
se repite diariamente mientras los terrícolas que se creen muy inteligentes,
siguen al cuidado de los descarriados explotadores. El carpintero confirmaba
con seguridad que los imperios con más facilidad asesinan al indefenso e
ignorante. La virgen María era una mujer viuda cuando su Hijo Jesús, estuvo a
punto de morir. Para quienes afirman que el Nazareno tenía más hermanos de
sangre, el santo Evangelio no nombra a ninguno de ellos camino al calvario ni
cerca a la cruz.
Si fue cierto que el Crucificado tuvo otros hermanos sanguíneos… ¿En dónde
estaban cuando la muerte sorprendió a Jesucristo? Hay versiones que se han lanzado
como nuevas noticias pero sólo son especulaciones. Las sagradas escrituras
hablan de hermanos espirituales. Como hijos de Dios los hombres tienen hermanos
espirituales pero no todos son sanguíneos entre sí. Hay hermanos sanguíneos que
no son hermanos espirituales. Hay personas no sanguíneas que se aman más y
superan a los mismos hermanos de sangre. A veces ellos y ellas derraman
lágrimas cuando un amigo o amiga no sanguínea muere. Otras, ni una lágrima, al saber
de la muerte de un hermano sanguíneo. Lo cierto es que el Cristo deja en manos
del apóstol Juan, el cuidado de su madre. Juan era el discípulo amado del
maestro obrero. Al parecer María sólo tenía a Jesucristo de compañía.
Se cree que Juan era el más joven entre los 12 seguidores escogidos. Algunos escudriñadores
calculan que Juan, tenía menos años que Jesús. Su edad podría oscilar entre 23
y 30 años. No entendemos como Jesús no entregó el cuidado de su madre al
apóstol Pedro, quien “supuestamente” seguiría al mando del grupo. Recordemos
que Pedro había negado tres veces al Nazareno y que el gallo alcanzó a cantar 3
veces como profetizó Jesucristo. No escogió Jesús a uno de los ancianos del
grupo sino al más joven. Al parecer Juan no sólo ganó la confianza de Jesús
sino nuestro Señor creyó que su madre María, corría menos peligro bajo el
cuidado de un varón joven. Milagro, Dios desconfió de los ancianos y de sus
picardías. Para amar y cuidar a una persona no se requiere edad, sexo,
experiencia o título. Ese hecho de entregar el cuidado de una madre a uno que
no llevaba la sangre de Jesús aún nos deja otros interrogantes. Ni Cristo ni
María tenían propiedades inmobiliarias. Los soldados obedientes al sicariato de
los gobernantes sanedrines, lo buscaron arriba de la montaña y bajo el espacio
de una cueva. Todo un Todopoderoso y no tuvo una casa de mármol y menos de
ladrillo. Le han inventado familia al carpintero pero los hechos narran que un
forastero de nombre Juan, cuido de la Virgen María al final. También es cierto
que a veces la misma familia causa más desconfianza en la vida de un hombre
recto que uno o una, de otro árbol genealógico.
El hombre Dios no era un comerciante. La mafia de la época le temía porque
ellos nunca subían a la montaña y desconocían los secretos del maestro divino.
Aquellos que no suben jamás pueden bajar con gracia. Quien está abajo le es
difícil subir. Aquello que está en las alturas poco lo captan quienes están
abajo así luzcan con oro, ropas doradas y finas. De las cosas de Cristo, la
Virgen algunas no entendía. Ella cada duda la guardo en su corazón y
permanecía en silencio por obediencia al ser puro que llevaba su alma. Juan se
sometió en obediencia al maestro aunque su humanidad estallo de éxtasis al
saber que no volvería a ver a quien había seguido. Todos estaban muy tristes.
El solo saber que un ser vivo probo muere, causa angustia. El hombre sencillo y
promotor del amor, quiso que los seres que amaba, siguieran juntos hasta el
final de los tiempos. Por eso lanzó una voz dulce y luminosa con ternura sobre
la pareja acongojada:
“« ¡Mujer, he ahí a tu Hijo! ¡He ahí a tu madre!» -“Mulier, ecce filius tuus,
et tu, ecce mater tua!”-, *"Woman, behold thy son."*. Juan. 19: 26-7.
El cuerpo de Cristo respondió como uno cualquiera al de otro mortal terrícola
humano en el momento de su propio sacrificio. Las energías de sus músculos no
lograron calmar el martirio. La silueta del maestro era la de un joven
carpintero. Los fuertes troncos de madera que tuvo que levantar en su vida y el
proceso transformador de los árboles, lo habían convertido en un ser fuerte sin
dejar de perder su ternura. Su rostro siempre lanzó luz al espacio del globo.
Los desalmados lo obligaron a cargar una pesada cruz más voluminosa que los
polines que sus brazos habían cargado. El imperio con sus soldados disfrutan
con la tortura. Los menos inteligentes y quienes producen desprecio, usan tortura
y armas, porque es la única manera que los hace vibrar en sus sesos mortales
con su cabeza junta. Esa sensación aliena la mente como si fueran súper
inteligentes. De hecho cada militar se siente fuerte si a su lado lo acompaña
un rifle o una lanza. Los más débiles e improductivos son los hombres armados
legales e ilegales. La fortaleza de Jesús el Nazareno, la hizo plasmar
desarmado y sin violencia. Todo cambio que conduce a un proyecto de paz, se da
sin armas ni violencias. La guerra es engendro de Satanás.
Jesús ya no tenía fuerzas físicas y no podía violar las leyes creadas. El debía
continuar con la carga hasta entrada la tarde. Por un momento su naturaleza
humana se desesperó y sus vibraciones quedaron al vacío. Su voz entrecortada
empezaba a palpitar como un corazón moribundo. Su mirada estaba perdida y el
plano de la tierra se empezó a alejar de su morada. El Cristo quería cumplir al
pie de la letra el mandato del Padre sin enojarse. Los mortales terrícolas
cuando se alteran lanzan gritos en contra de otros hombres, y hasta se
desquitan con animales y plantas. El ser que se fue del globo terráqueo era
diferente a todos. No insultó a sus asesinos. Su saliva no la utilizó para
escupir a los depravados gobernantes de siempre. Parece que es maldición el
arte de gobernar desde antes y se usa como purga histórica.
Su inocencia, pureza y pulcritud, lo hizo acudir directamente a quien lo había
engendrado. Hasta antes de partir del lugar, que no llegó a ser paraíso, el
carpintero mantuvo la calma, uso con sencillez su doble naturaleza para hablar
con el Dios creador de su figura y vida. La tarde empezaba a llegar y el sudor
de su cuerpo se estaba convirtiendo en roció mañanero. Estaba cansado y aun así
no miró abajo en donde sólo disfrutan los involucionados. Con cierta nostalgia
pero seguro que lo escuchaban tanto abajo como arriba, dijo:
“«Dios mío, Dios, mío, ¿por qué me has abandonado?» -“Eli, Eli, lama
asabthani?”-, *"My God, My God, why hast thou forsaken me"*.” Marcos
15: 34 (Mateo 27: 46).
El hombre de las dos naturalezas, había agotado cada recurso de agua de su
cuerpo. Toda gota se convirtió en sangre de dolor para quienes seguían el
proyecto de paz y hermandad de quien regalaba luz a su paso. Los verdugos
maltrataron a Cristo y querían verlo morir de sed. Lo obligaron a desgastar el
contenido de toda una fuerza galáctica. No podía a última hora desfallecer y
debía dar ejemplo de templanza en medio de la angustia. Sabía que después de
él, otros muchos caerían bajo el poder de los equivocados sí los hombres no se
organizaban como inteligentes. Los gobiernos malvados y perversos ya estaban empotrados
como imperio. Era costumbre de pobres y menesterosos, vivir en desiertos, en
aquellas regiones malsanas, deshabitadas y de difícil acceso aún para las
mulas. Los matones se habían robado las fuentes de agua pura y las habían
convertido en producción para sus propios intereses. Dios creó el agua
cristalina y potable. Los corruptos con sus putrefactos inventos planearon
negar el agua y la comercializaron, usurpando el átomo creado para todos y
obligando a los hombres a vivir como indigentes. La contaminación del espacio y
fuentes, empezó a sentirse como terremoto en esa temporada.
Los imperialistas pusieron a prueba al “León de Judá” y lo llevaron presionado
hasta su agotamiento. Jesús contempló los cielos de Dios y el firmamento del
que disponían los mortales terrícolas humanos, desgajaba su dolor y angustia en
la fe hacia el Creador. El arma consiente hizo brotar sangre pura del maestro.
El brillante sol de la tarde empezó a cerrar sus puertas para siempre. Hoy ya
no es el mismo sol. Los gobernantes mientras tanto tomaban vino, degustaron
delicias pasajeras, maquinaron bacanales y orgías desde sus interiores. Ha sido
muy difícil retirar de los palacios las desviaciones y depravaciones porque los
santos como Cristo, no tienen donde recostar la cabeza. La montaña empezó a
lanzar un especial frío. Hubo nubes que danzaron sobre la cabeza de los
ajusticiados. El Nazareno compartió con sus dos hermanos de celda a la
intemperie, el clamor de igualdad y justicia. Las celdas de cárceles
imperialistas están repletas de inocentes y rectos. Las cadenas de los puestas
sobre manos y pies de inmigrantes, y emigrantes, aun huele a azufre de muerte
en todas las naciones. Usan el hierro para asustar a las multitudes.
Los soldados creyeron que fue un juego lo que presenciaron sus ineptos sentidos
y ojos. Mientras los tres enmaderados sufrían, ellos se carcajearon y acariciaron
sus figuras, con la sombra del arco iris moderno, dejando salir plumas de
cuervos que los delincuentes comandantes, habían sembrado en sus entrañas. Sus
uniformes desgastados y nauseabundos, truncaron la transparencia de lo
desconocido. El pueblo guardaba silencio y el temor con miedo, estuvo
acobardando a los gigantes. En medio de la tragedia, el viento lanzo un canto
dorado y los pobladores se aterraron con los silbidos. Las botas de hoy son las
sandalias ensangrentadas del pasado. Los curiosos que estaban en la caravana y
entre los chismosos, poco a poco se fueron alejando del sagrado monte y la
tierra les negó la entrada.
El carpintero levantó con gallardía su cabeza hacia las alturas y con un
profundo resplandor y rayo de cristales, expresó:
“« ¡Tengo sed! »” -“Sítio”-, *"I thirst."*. Juan 19: 28.
Faltaban pocos minutos para llegar la hora cero de muerte cuando el imperio vio
en el horizonte atmosférico, el acercamiento de hermosas mariposas que jugaban
como niños traviesos, junto a ellas un coro de voces angelicales que bañaron de
fragancia al humilde histórico con cantos de musas que repartieron melodías y
notas musicales hacia las estrellas. Ellas llegaron para acompañar a los
moribundos que se despedían del plano terrícola, convertido en infierno por los
ilícitos e ilegales malhechores. Los jerarcas inquisidores no alcanzaron la
civilización del amor y siguieron la oscuridad de la caverna habitada. La vida
y evolución se despidió y la palabra dejó infinitos interrogantes y vacíos en
quienes intentaron entender el milagro de la perfección. Aves de variados
colores aterrizaron sobre las siluetas de los sacrificados y un oleaje de
ensueños y sueños tejieron mas ruina en aquellas mentes que se sentían
privilegiadas.
Los esclavos militares que cuidaban a los moribundos estaban cansados y
actuaban como sonámbulos robots que se dejan manipular por circuitos
controlados. Fuera de Juan, el discípulo amado, no hubo allí jóvenes ni
infantes alrededor de la macabra odisea. La mayoría de quienes se retiraban del
episodio, eran ancianos que ya pasaban los 50 lustros de vida. Muy corta la
existencia pasajera y nada nos llevamos a la fría tumba, dijo uno de los
caminantes del ocaso. El paso por el planeta tierra es muy corto. No alcanzamos
a disfrutar la felicidad por la arrogancia y el no uso de la inteligencia
recibida en forma gratuita. La tarde en segundos se convirtió en una larga
noche de agonía. Las multitudes no estaban acostumbradas a rezos u oraciones
por quienes se iban a la otra dimensión. Los de la época se despedían como si
salieran de una fiesta. Allí también actuaba la mafia de lo “ilícito” con sus
trucos, estrategias y estafas. Muchos testigos de la cruel escena, continuaron
en algarabía en las cantinas y acantilados, con sus murgas y bailes de muerte,
acompañando el día con hierbas procesadas y bebidas embriagantes.
Los imperios nunca dejan testigos al final de los crueles episodios y se las
ingenian para que los artistas y creativos se alejen de los lugares en donde se
tortura a los inocentes. Una paloma blanca recorrió de norte a sur y de oriente
a occidente la cruz del desaparecido, mientras el Cristo aún de carne y hueso y
con escasa energía, lanzó su propia inspiración:
“«Todo está consumado»”-“Consumatum est”-, *"It is finished."*. Juan
19: 30.
Quienes recibieron favores del maestro no entendieron su real presencia y su
firme paso por la madre tierra. Aquellos que no le conocieron, simplemente
dejaron pasar el episodio como una rueda suelta de circo y baratija. Allí con
la sangre del Cristo, se tejió la sustentación de los agnósticos, ateos, de los
mismos que se creen científicos y con ‘conferencias’ distraen el hambre de los
pueblos y confunden con injusticias a necios, que labran documentos desalmados
sin excelsas madres biológicas. Los fanáticos y atrasados mortales usaron el
mismo día el suceso, para estafar con predicaciones y oratorias a las
multitudes que aun no le conocen.
Otros levantaron con gritos y arengas los brazos a los montes pero sus voces no
pasaron la cruz del Nazareno. El hombre portador del mensaje de paz y dueño del
universo, no presentó diplomas o títulos de baratijas como ‘doctoritis’, que
entregan y venden las universidades e instituciones que se encargan de adornar
el papel del laboratorio, traumatizan a los incautos de la propaganda que lleva
a la ruina con muerte. Hay diplomas que se confeccionan debajo de escaleras de
alcantarillas moribundas. Los asesinos colocaron mármol en las entradas de sus
mansiones de ladrillo y piedra, sobre los pisos aplicaron alfombras en sus
edificios, para hacer creer a los grupos amorfos, que ellos portaban el brillo
y la misma luz que desconocen.
Jesús de Nazaret no volvió a mirar a quienes estaban abajo, se olvidó de secuaces,
de sus caravanas y templos. Por fin se despejó la duda a quienes usaban la
religión para alienar a los pueblos y a las mismas razas. El pésimo discípulo
‘Pedro’, no se enteró con exactitud del final ni del mismo martirio, continuó
asustado y lejos de las miradas. Por eso otros aprovecharon la confusión, para
usar como arma de sometimiento y explotación a los hijos obedientes de la
oscuridad y desobedientes a la luz del verdadero Cristo de Belén. La ignorancia
de las multitudes y las injusticias aplicadas por sanedrines y sacerdotes, no
dejaron pensar a las mayorías. Esas se metieron de nuevo a los lugares de
culto, como ratones y cucarachas, que ingresan a las bibliotecas en busca de
papeles raídos para pasar el hambre física que produce el no entendimiento de
aquello que no debe ser misterio.
Una nube gigante color ceniza, cubrió el lugar de cada una de las montañas y se
posó sobre cada casa, alertando a la noche sin dejar ver la aurora de la
madrugada siguiente. Las aves buscaron refugio antes de la hora y animales
salvajes pararon sus hábitos aprendidos como si un relámpago o trueno, les
hubiera hecho saber que la congoja y nostalgia, estarían hasta el final de los
días de la tierra moribunda con psicópatas sueltos en cada punto del hemisferio
que perdió su fuerza como centella. Los sepulcros abrieron sus postigos
mientras los pescadores, humildes y sencillos, recibieron el llamado al
servicio como maestros del amor y vida. Los obreros y campesinos sí estuvieron
tristes. Muchos corazones se desgarraron por el fuego de la partida del jefe de
la tribu escogida y selecta. Los mansos y llamados, estuvieron lejos de los
militares y no pudieron ingresar al lugar de la crucifixión.
Al despedirse de la sociedad que no aceptó el grito de reconciliación y al ver un
mundo convertido en guerra y violencia, el Dios de todos, cerró sus ojos y
antes que dejara caer diamantes, perlas y oro, sobre los culpables, dijo:
“« ¡Padre, en tus manos entrego mi Espíritu!»” -“Pater, in tuas manus commendo
spiritum meum”-, *Into thins hands, O Lord, I commend my spirit."*. Lukas
23: 46.rit."*. Lukas 23: 46.