Existe un varón que dice ser religioso en un país del Cono Sur, que persigue y atropella a los diferentes, con flechas venenosas de muerte y exterminio a través de una pluma sanguinaria. Hay otro de la misma calaña encima del Mar Mediterráneo, que es inquisidor y tortura a quienes libremente no aceptan la existencia de Dios ni de cosas o hechos sobre naturales y/o paranormales. El sureño cree ser propietario de la organización religiosa verdadera y el norteño, al parecer tiene las escrituras del “cielo de Dios’ con un sequito de pequeñas escrituritas, que lo hacen dueño del pensamiento y de cualquier idea o palabra comunicacional. El del sur quisiera resucitar a Pinochet para que le ayudara a masacrar a diferentes, ateos y agnósticos. El pelafustán del norte, busca formulas mágicas para darle vida a Franco y/o Napoleón, y lograr su cruel propósito de desaparecer a quienes piensan y viven diferente. Ateos, agnósticos y diferentes, no sólo tienen derecho a existir sino que cada individuo mortal terrícola humano por naturaleza, tiene derecho a ser diferente dentro de un colectivo posiblemente equivocado. La política y religión, hizo que el mundo moderno se acostumbre a matar y se complazca con cada asesinato. Los mortales terrícolas humanos son autores y cómplices de asesinatos, de la desintegración de la vida y destrucción del planeta tierra. Los hombres han hecho armas y bombas para secuestrar, eliminar, contaminar y matar. Los militares y hombres armados legales e ilegales, son responsables de cada masacre y asesinato.
Dios se retiró hace mucho tiempo de las organizaciones religiosas y no escucha oraciones ni rezos de los farsantes. Los falsos e impostores se apoderaron de las enseñanzas de Cristo y usan la Palabra de Dios como excusa perversa para matar. “No teman a quienes sólo pueden matar el cuerpo, pero no el alma; teman mas bien a quien puede destruir el alma y cuerpo en el infierno”. (Jesús de Nazaret. Mateo 10/28). Los perversos hombres de Roma Vaticana, España y otros países europeos, maquinaron con la ayuda de Satanás, la penosa y sanguinaria Inquisición que fue copiada con crueldad en América por hombres perversos y psicópatas. ¿Cómo es posible, se ha prostituido Sion, la ciudad fiel, el reino de la justicia en que moraba la rectitud que te conformabas a mis leyes?, pero ahora sólo es un barrio de asesinos. Tu plata se ha convertido en basura, tu vino está mezclado con agua. Tus jefes son unos rebeldes, cómplices de ladrones. Todos esperan recompensa y van detrás de los regalos. No hacen justicia al huérfano ni atienden la causa de la viuda”. (Antiguo Testamento. Isaías 1. 21/23). La organización religiosa perdió la sucesión apostólica y la entrada al cielo de Dios, al usar la espada y tortura para asesinar a hijos e hijas de Dios. El Todopoderoso desconfía de los perversos rufianes y los tiene en cuarentena entre rejas purgantes. Dios ha desheredado a todos los hijos espirituales de la cruel inquisición. Jamás los asesinos pueden enseñar o ser ejemplo de rectitud. La hoguera fue uno de los instrumentos que el Gran Satán, consideró patético para dar rienda suelta a cada desvió. Las secuelas de la inquisición, llegaron a varios territorios de la geografía universal terrícola y murieron a espada, cuchillo y leña, santos e inocentes. “No mates/No matarás.” (Antiguo Testamento. Éxodo 20/13).
La Iglesia verdadera de Dios jamás hubiera matado un cuerpo vivo. La vida es hecha a imagen de Dios y se debe respetar. Aquellos países en donde no se respeta la vida, son tierras malditas y hasta el oro deja de brillar. Los hijos e hijas espirituales de los inquisidores, perdieron el derecho para ingresar al cielo de Dios. Ningún asesino tiene perdón de Dios. Cada alma asesina esta condenada eternamente al infierno. Algunos entre otros, como Hitler, Franco y Pinochet, ni siquiera tienen derecho para entrar al infierno. Hoy el ángel de Dios, ha bajado silencioso a la tierra de los mortales terrícolas humanos y les recuerda las excelsas y diáfanas enseñanzas del Maestro de maestros: “Amaras al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu inteligencia y con todas tus fuerzas. Y después viene este otro: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay ningún mandamiento mas importante que éstos”. (Jesús de Nazaret. Marcos 12. 29/30). Creyentes, incrédulos, ateos, agnósticos y diferentes, deben devolver aquello robado, para que la justicia materialice el proyecto de la ciudad del amor. Los ricos tienen poco tiempo para entregar lo usurpado a las mayorías que requieren de bienestar, comodidad e igualdad. La luz de Dios esta próxima a llegar a la tierra de los mortales. Los ángeles de Dios, vienen viajando por el espacio cósmico del amor, para materializar la justicia que los hombres no pudieron lograr. Naves equipadas con nueva vida, tecnología e instrucciones divinas, aterrizarán en varios puntos de la geografía del globo terráqueo.
Si usted tiene dos casas, regale una a una familia que vive a la intemperie. Si hay dos camisas en su ropero, entregue una a uno que tiene frio. Limpie su casa y entregue las pertenencias que no usa a quienes las requieren con urgencia. Su dinero es el recurso que necesitan las comunidades para la vida. No sea miserable ni ruin humillando con quienes nada poseen. Sus títulos y diplomas se los comerá la polilla del amor en poco tiempo. Arrogancia y petulancia serán destruidas de la faz de la tierra. Sus carros y naves serán arrasados por el fuego divino que se aproxima. Deje de perseguir a quien piensa diferente. Usted tendrá su merecido de parte del Dios vivo y verdadero. Fundan el oro y la plata, y regrésenlo a la tierra de donde los sacaron abusivamente. Desocupe los graneros y depósitos en donde su ambición ha guardado los alimentos de los hijos e hijas de Dios y repártalos en iguales proporciones a los menesterosos. Los bancos deben parar de robar con intereses de muerte. Que no se construyan nuevas catedrales, capillas, templos o afines. ”No quedara piedra sobre piedra”. El viento fuerte de Dios destruirá todo a su paso y lo primero en derrumbarse serán los edificios de los ambiciosos y avarientos. Los centros turísticos a orillas de los mares y en donde descansan los falsos ricos y poderosos, serán desintegrados frente a los injustos. No habrá poder humano para detener el cobro de la justicia divina. Las aguas seguirán aumentando y lluvias torrenciales golpearán las propiedades de mezquinos y miserables. Fuego divino hará arder el papel dinero y los lanzara a las profundidades de la tierra y del mar. Detenga el consumo de alcohol y el arte de fumar, porque ese también es el recurso de la justicia. La cocaína y marihuana deben regresar a su estado natural creado. La industria contaminadora y las fábricas que lesionaron el planeta se deben desintegrar para darle paso al viento fresco de Dios. El año 2011, es el tiempo de espera de Dios para los justos. Quedan 12 meses para poner en orden la casa. Los adúlteros deben regresar con sus esposas verdaderas. Las adúlteras deben regresar con sus esposos verdaderos.
Que nadie se quede fuera de casa. Aquellos que en el pasado vivieron con suntuosidad, deben dormir desde hoy sobre tablas o en el suelo creado. Quien haya abandonado a sus hijos es hora de la reconciliación. El amor debe primar por encima del odio. Soldados, militares y policías se deben desintegrar. No se requieren hombres armados en la nueva tierra. Todo proyecto debe planearse para la justicia e igualdad sin política ni falsas religiones. Las mujeres deben regresar a su femineidad. Los varones deben alistarse para recibir su propia masculinidad sin exageraciones enfermizas. Llego el tiempo de la rectitud. Dios perdonara el pasado aun a quienes masacraron la vida si hay arrepentimiento y cambio verdadero. Los grupos y multinacionales que robaron tierras y propiedades, deben entregar lo sustraído con interés justo a sus verdaderos propietarios. Los gobiernos deben rodear de amor a campesinos y trabajadores. La pulcritud y rectitud debe regresar a nuestra casa. La tierra es la casa que nos dejo Dios como nave espacial para aprovechar la vida con amor.
Rendimos postumo y eterno homenaje a la memoria del caudillo de la paz Robert Francis Kennedy. Bienaventurados quienes buscan la justicia sin guerra y por medio de una paz civilizada con bienestar. El cielo de Dios para todos los hombres que desprecian las armas y se acogen al equlibrio del amor. Paz en la Tumba del lider asesinado en USA en 1968.
