Cárceles de la muerte: Los últimos días del mes de junio 2022, han
desenmascarado a mafias que conviven con la corrupción, las mismas han sembrado
desigualdad, pobreza, miseria e injusticias en países de America-Latina y en
otros que también se suman a la barbarie de la descomposición social y muerte. Los
muertos y la destrucción que dejan misiles, bombas, fusiles y vehículos de muerte, disparados por dementes gobiernos, quedan cortos como tornados y aún nos sorprendimos al conocer la muerte de 52 reclusos y más de 50 heridos
en una maloliente prisión de la ciudad de Tuluá, Valle, dentro de la República
de Colombia. Es hora de reafirmar que un 90% de las mujeres latinoamericanas privadas
de libertad y varones latinoamericanos que se encuentran detenidos en estos
centros de concentración y hacinamiento carcelario, arriban a esos antros asquerosos de
muerte por culpa de la corrupción de autoridades civiles, militares, guardianes
carcelarios, sindicatos estafadores, jueces, abogados haraganes y estafadores, por el sistema de justicia mortorio que ha convertido la privación de la libertad en
negocio ilícito y mercado persa de los remiendos infernados.
El 70% de los reclusos en cada país de America Latina, pertenecen
a sectores populares atropellados, a grupos vulnerables que no han visto la mano amiga de sus
gobiernos en cada una de las necesidades básicas en cada lugar, a la mediocridad e ineptitud
de los gobernantes, a la misma manipulación de la ley que hacen los
politiqueros de turno en sus territorios, creando estímulos a la delincuencia organizada
y desorganizada de cuello blanco, entregando herramientas de muerte a un puñado
de sinvergüenzas mortales terrícolas humanos que roban privilegios y
oportunidades. Aunque los recursos que produce el país y la misma tierra,
deberían estar al alcance de todo un pueblo, unas pocas familias atracadoras
aparecen en las escrituras públicas tanto de los inmuebles como de las tierras
de la nación como herederos de las tierras que sirven para cultivar marihuana, arbustos de coca y regar semillas de amapola, para sumar capitales a otros vampiros extranjeros que hacen fila en los clubes de perdición.
Los pobres humanos producto de la corrupción desde que nacen pierden la esperanza, comprenden que privilegios y oportunidades están en manos de muy pocos y de quienes con estrategias nocivas e injustas, no sólo usurpan las tierras que le pertenecen a las mayorías sino que saquean los recursos públicos, para comprar bienes raíces, carros contaminantes, propiedades e inmuebles, con suntuosos electrodomésticos, mientras los atropellados y los más indefensos tienen que construir sus ranchos y casuchas sobre costas, aguas, arenas, mares, océanos, ríos y ciénagas. 2.500 familias entre 50 millones de habitantes, le robaron las tierras a indígenas, campesinos y a descendientes de la raza negra. Los hijos discriminados de bienestar y justicia continúan en la miseria, algunos deben robar alimentos para sobrevivir frente a la hecatombe social implantada por las rapiña de sus gobernantes, varios deben sacar sobrantes de las canecas en las plazas de mercado, en las cajas raídas de material reciclable de supermercados, empresas, factorías y droguerías, otros entregan su cuerpo a varias mafias de la perversión sexual o entregan su silueta como bailarines en los prostíbulos ambulantes en las grandes ciudades del vicio o en otros hacinamientos poblacionales.
Los fraudulentos raponeros públicos ingresan con la suela de sus zapatos rotos cuando asumen el cargo de gobernante o funcionario y salen con haciendas, tierras, ganado, amantes, hijos de desorden, bodegas, bancos, se convierten de la noche a la mañana en magnates como por arte mágico de la alquimia de los mismos pícaros públicos de todos los tiempos, mientras las paredes de las terroríficas cárceles ni siquiera ven la pintura de la desdicha o la brocha del luto de las ratas. La justicia sobrenatural caerá sobre sus espaldas, los 4 elementales borraran en su momento del mapa geográfico cada elemento robado o sustraído y sabemos que está cerca. Los raponeros ladrones deben devolver para el bienestar de las multitudes, el dinero y los elementos robados incluyendo tierras, bienes, muebles e inmuebles.
Abogados, jueces, funcionarios públicos, gobernantes, guardianes carcelarios, administradores gubernamentales y fiscales, hacen parte de la familia de corruptos vampiros entre otras mafias, fácilmente recargan la injusticia sobre inocentes e incautos, estos explotados y ratones de laboratorio son la mayoría a quienes los hacen presos dentro de edificios que son cloacas abandonadas, los mismos guardianes carceleros se aprovechan de los privados de libertad, no sólo para violentar la existencia sino para violar sexualmente a quienes en forma natural llegan con ciertas curvas en su silueta y las mismas despiertan apetitos apestosos a pervertidos y depravados funcionarios de la injusticia.
El hecho macabro y tétrico de ciudad Tuluá, es una de las variantes de la descomposición social en donde la mafia gobernante tiene asumido a todo un pueblo, que logra sobrevivir con hambre la faena grotesca impuesta en medio de pobreza, miseria, congoja y allí permanecen encerrados muchos años, mientras jueces y abogados apestan en las discotecas o cantinas como antros de muerte o se ven en las playas contaminadas abrazados de menores o menoras porque el dinero de la rapiña tambien abre apetitos embarazosos. Las oficinas gubernamentales de la “injusticia” están repletas de fólderes y papeles que no leen los haraganes ni revisan los vagos, porque les interesa más las telebobelas de la irrisoria y putrefacta farándula, los chistes de pacotilla que inventan los desocupados vividores o las falsas noticias que arreglan los peligrosos periodistas de la farsa.
Mujeres y varones prisioneros duermen en pisos de tierra y cemento como chamizos, agrupados como si fueran canastos desgastados, sin ropa semidesnudos, descalzos, en chozas improvisadas dentro de los patios de las mugrientas cárceles de alcantarilla, deben bañarse en grupo por turno de 15 en 15, en unidades sanitarias que parecen orquestadas por cuentos de fantasmas malignos de otros planetas, allí en cada uno de esos lugares apestosos, la infame jurisprudencia se jacta de llevar al inocente como vil delincuente a esos lugares de muerte. Los verdaderos ladrones, asesinos, atracadores, depravados y pervertidos, están viajando como visitantes por el mundo de las mafias del turismo, sentados en oficinas como marionetas de papel o chatarra, citando a la concubina o amante por teléfono con brillo esmaltado o simplemente revisando las cuentas del dinero usurpado del erario público para continuar econ la estafa entre los desalmados gobernantes.
Algunos dicen tener la conciencia limpia, afirman haber confesado sus
pecados y delitos a los oídos de un payaso ensotanado del circo religioso, que han acudido en
procesiñn para tocar un matacho de madera o yeso, y que el material venenoso imperial inquisidor, los limpia de maldades, embrujos y hechicerías que creen que venían en su genética sanguínea de
sus ancestros. El dinero robado, las pertenencias y tierras usurpadas a los
verdaderos propietarios, las hacen bendecir por charlatanes de la farsa espiritual, creen
que la protección a partir de ese momento cae de arriba, pero ni siquiera llega
la de los vampiros, porque hay delitos que no tienen perdón ni olvido.
Al parecer el coeficiente intelectual de los llamados líderes
y gobernantes, no tiene suficiente materia gris en su composición física como para
elaborar proyectos visibles o escritos y transformar la nación indisciplinada de injusticia en un país progresista con justicia y dignidad para todas y todos. La “gran
miseria humana” de la poesía barata hace opera y música en los sistemas políticos que
se recuestan a la izquierda o a la derecha para convencer a ignorantes, otros
facinerosos delincuentes dicen hacerse al centro de las ideas porque tienen el
mejor de los proyectos. Todas y todos están ambicionando llegar a la casona de
la estafa para llenar sus bolsillos y cuentas bancarias con los recursos que roban hasta de las alcantarillas en sus mismos aposentos. Hay una maldición que lleva
rodando las mentes y corazones en los últimos 200 años dentro de la descomposición
social, están aliados con mafias provenientes de imperios inquisidores religiosos o beben el
vino amargo de regímenes espirituales del inframundo.
Estos funcionarios de pacotilla y remiendos, tienen su
propio sanedrín para aplicar inquisiciones y masacres a pueblos inocentes e ingenuos, secuestran,
asesinan y desaparecen a ciudadanas y ciudadanos enfermos aun de la mente con “falsos
positivos.” Poseen una red de testigos falsos para llevar entre rejas a inocentes
de los últimos días, la misma ingenua sociedad que vive en la miseria están convencidos
que pertenecen a la realeza fraudulenta de la estafa, contratando mediocres
periodistas para que inventen historias de sus antepasados, elaboran estatuas
de yeso, bronce o madera, imitando los rostros de los “padres” de la estafa,
del robo histórico de la miseria y plasman imágenes en pinturas de héroes inventados
por el desgaste de células humanoides facinerosas de los cachivaches entre las
pulgas y alacranes provenientes de otras tumbas.
Si lográramos conseguir un mortal terrícola humano honrado
entre las multitudes y poner en la silla gubernamental a ciudadanas o
ciudadanos honestos y transparentes, inmediatamente se desocuparían las cárceles,
esos espacios se convertirían en unidades deportivas, artísticas,
educacionales, productivas agro-industriales, proyectos de vivienda para que se
instalen quienes aún viven sobre las aguas en casuchas de cartón, latas o paja,
centros de salud, hospitales, espacios recreativos o zonas verdes para que sean
pulmones vegetales para la purificación del aire. Los inocentes detenidos se convertirían
en varones y mujeres de producción, se ahorraría la inversión de los haraganes
que trabajan en la supuesta justicia, las universidades dejarían de robar con
la tarifa, porque la educación seria pública y gratuita, la salud y medicina estaría
gratis al alcance de todos, se regularían los sueldos de los funcionarios públicos
para lograr que la nuevas acciones detengan el reloj de la manipulación y el robo
de privilegios y oportunidades.
Si usamos la inteligencia y la misma razón para elaborar proyectos
y lograr equilibrar el maltrato social humano de los últimos tiempos, evitaremos
prolongar la hecatombe y la desgracia en cada país que aún no ha logrado salir
de la caverna infernal, cuya culpa y responsabilidad la poseen los gobernantes
y funcionarios públicos, que han hecho de un cielo azulado, un infierno caliente
en donde nadie quiere vivir o pertenecer, por el contrario algunas mayorías se
suicidad, los soñadores desean viajar a un nuevo planeta tierra y algunos se
hacen los orates para que los conduzcan a otros antros que llaman psiquiátricos
donde otros mal llamados profesionales, también estafan y roban con la gran
mentira montada como psicología o psiquiatría, así cada día aumentan los
enfermos de la mente, los métodos de los tales facultativos son otro fraude,
esos hospitales o antros de tratamientos enfermizos, son iguales o peores a la cárceles
de muerte, quien ingresa allí desprevenido, si logra salir al mundo del aire, sale
más confundido que ratón o liebre sobre techo de aluminio o panel solar.
Si aplicamos la verdadera justicia debemos comprender que aunque la “gran culpa” de la desgracia y delito son protagonizadas por funcionarios públicos y gobernantes, debemos equilibrar la responsabilidad en la balanza, al saber que todas y todos tienen culpa dentro del delito porque aunque no es fácil entender el camino de la caverna a la luz, cada mortal terrícola humano sea varón o mujer, debe hacer un esfuerzo inteligente para usar la energía de cambio que está en cada interior de su propio ser, lograr disciplinar la razón, el placer, la preferencia sexual bajo control de la inteligencia, incentivar la imaginación para que salten al exterior proyectos de honestidad y transparencia, al salir de la caverna a la luz aparece el amor como acto regulador de la conciencia y hecho, abandonar ciertos vicios que coartan la libertad y el libre albedrío, controlar la relación sexual tanto en número como en resultados para engendrar o concebir, aumentar los alimentos vegetales y frutas dentro de la alimentación para pensar y actuar como mejores personas, disminuir el consumo de carnes blancas o rojas, cerrar fábricas de armas, cigarrillos, alcohol usar el escenarios de las artes y el teatro para llevar a cabo los personajes oscuros que habitan como monstruos dentro de cada mortal terrícola humano, buscar individualmente la mejor herramienta interna en la construcción de la plena felicidad sin acudir a la violencia y jamás a la guerra o muerte.
No podemos asegurar que los corruptos puedan cambiar de
la noche a la mañana o que ellos y ellas van a devolver lo robado, usurpado o sustraído,
todas y todos deben hacer un intento para crear y pasar al nuevo hombre, a la
nueva sociedad, con nueva música entre tambores e instrumentos, entre todos
construir la cultura de la paz con dignidad y seguridad. Si el bienestar, el
privilegio y la oportunidad la logramos llevar a todo mortal terrícola humano,
los hombres no necesitarían cárceles, nunca militares, jamás policías, ni abogados, fiscales o jueces,
porque cada cual sería su propio juez en la justicia, las pertenencias serian
colectivas sin rejas ni candados. Por encima de la caverna está siempre la luz que nos hará
en la comprensión, un mejor ser pensante en este plano y en los otros a donde
debemos ir y pasar de dimensión en dimensión en forma ascendente y fructífera
hasta conquistar en cada tierra la igualdad
sin opresión o explotación. Eso si todas y todas produciendo de acuerdo al
talento, habilidad, preferencia y libertad. Para el necio es imposible, pero para
el inteligente con buen uso de la razón todo es posible, no existirán barreras
ni obstáculos cuando de amar y servir se trata en la acción de vivir con
dignidad, decoro y equilibrio.
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